Transcurridos 31 años desde su asesinato, la justicia chilena abrió ayer un juicio contra el presunto asesino del cantante y compositor Víctor Jara, ejecutado días después del golpe militar que encabezó el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973.
El procesamiento, que dictó el juez Juan Carlos Urrutia, recayó sobre el retirado teniente coronel del Ejército, Mario Manríquez Bravo, acusado como autor del asesinato cometido cuatro días después de instalada de dictadura.