Nuestro país rememora en esta fecha el tricentenario (300 años) del nacimiento del geógrafo y científico riobambeño Pedro Vicente Maldonado, quien se convirtió en un forjador de la nacionalidad por su obra que afianzó el conocimiento del territorio patrio en plena etapa colonial. El ilustre personaje vino al mundo el 24 de noviembre de 1704 y falleció el 17 del mismo mes en 1748, en Londres, Inglaterra.
Maldonado viajó e investigó incansablemente, hizo trazos, levantó mapas, descubrió costumbres y aprendió la forma de vida de las etnias y nacionalidades indígenas de la región amazónica. Fue alcalde ordinario de primer voto en su ciudad y se lo reconoció como teniente general de corregidor. Cuando desempeñó la gobernación de Atacames (1738), intensificó su trabajo para construir una vía que uniera Quito con el Pacífico, venciendo las tupidas selvas esmeraldeñas.
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Cuando llegó a la Presidencia de Quito la Primera Misión Geodésica Francesa (1736), fue a él a quien pidieron colaboración los europeos porque observaron su dominio de la cartografía, matemáticas y otras disciplinas. Por esto, cuando Carlos María de la Condamine retornó al Viejo Continente lo invitó a integrarse a la delegación, pero antes recorrió en su compañía el Oriente nuestro y aprendió de su abundante documentación.
En tierra europea el célebre riobambeño visitó París, Suiza, los Países Bajos y Londres; por sus incuestionables méritos la Academia de Ciencias de París lo recibió como miembro en 1747. Estaba a punto de recibir similar distinción en Inglaterra cuando lo sorprendió la muerte. Dejó para la posteridad la monumental obra Carta de la Provincia de Quito y sus Adyacentes, que se publicó después de su fallecimiento.
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Poblaciones, centros educativos, parques, calles, edificios e instituciones perpetúan el nombre del sabio compatriota, sobre quien Alejandro de Humboldt consignó: “A excepción de los mapas de Egipto y de algunas partes de las Grandes Indias, la obra más cabal que se conoce respecto de las posesiones ultramarinas de los europeos, es sin duda el mapa del reino de Quito, levantado por Maldonado”.