Una adolescente estadounidense de 15 años se  transformó en el primer caso conocido de supervivencia a la rabia sin ser  vacunada, afirmaron los médicos que la trataron.
 
La joven, Jeanna Giese, contrajo el mortal virus al ser mordida por un  murciélago en una iglesia a mediados de septiembre, y un mes después tuvo que  ser internada, dijo el hospital de niños de Wisconsin.
 
Los médicos hicieron el diagnóstico en base a sus síntomas: períodos de  pérdida de la conciencia, doble visión, dificultad para articular el habla y  debilidad en su brazo izquierdo.
 
La enfermedad estaba en un punto en el cual aplicar una vacunar ya no era  efectivo, por lo que los especialistas decidieron probar con algo nuevo:  inducir un coma en forma química y aplicar luego medicinas que estimularan su  sistema inmunológico.
 
El objetivo era proteger el cerebro de la paciente mientras el virus hacía  su proceso en el resto del cuerpo, dijo Rodney Willoughby, el especialista en  infecciones infantiles que dirigió al equipo médico. Disfunción cerebral es la principal causa de muerte en los casos de rabia.
 
Tras una semana de tratamiento, los exámenes mostraron que Giese estaba  generando anticuerpos para combatir el virus, que comenzó a retroceder. Por  tanto, se fue disminuyendo el nivel de drogas inductoras de coma para que  recuperara la conciencia.
 
Las pruebas de laboratorio dicen que la adolescente "superó la infección  por rabia", dijo Willoughby.
 
La joven está físicamente débil pero reconoce a sus padres y recupera  fuerzas, agregó.