Las tropas estadounidenses penetraron este jueves en las céntricas calles del barrio bagdadí de ciudad al Sadr, bastión en la capital del clérigo rebelde Muqtada al Sadr, para retomar el control de sus principales arterias.
Fuentes de la policía iraquí señalaron que tropas acompañadas por carros de combate y blindados refuerzan desde primera hora de este miércoles el asedio levantado en este arrabal en el que viven más de dos millones de personas, la mayoría empobrecidos.
Patrullas de marines, con las armas en posición de combate, patrullan por las principales calles de la populosa barriada acompañados por traductores iraquíes armados con altavoces que instan a la población civil a salir y "no proteger a los milicianos".
Ya a primera hora de hoy, escuadrillas de helicópteros artillados estadounidenses atacaron supuestas posiciones en ciudad al-Sadr del Ejército del Mahdi, la milicia leal al clérigo rebelde.
Según el mando militar en Bagdad, los ataques se produjeron de madrugada, horas después de que el portavoz de EEUU indicara que más de 50 milicianos chiíes habían muerto durante las operaciones que se llevan a cabo desde el pasado martes para retomar el control de ese barrio de la capital iraquí.
"El objetivo de estas operaciones es echar a las fuerzas enemigas", señaló el capitán Brian OMalley, portavoz militar.
Las fuerzas de EEUU salieron de ciudad al Sadr cuando hace unas dos semanas arreciaron los ataques contra las patrullas y los equipos militares que supervisan proyectos de mejora del sistema de distribución de agua potable y energía eléctrica.
La acción pretende estrechar el cerco sobre la milicia "Ejército del Mahdi", que controla el religioso y que hoy no daba señales de estar dispuesta a rendir las armas, pese al acuerdo al que llegó por escrito el miércoles el propio Al Sadr en Nayaf.
Según testigos en la asediada ciudad santa chií, miembros de la Primera División Expedicionaria de Marines también se han apostado hoy a escasos 200 metros del santuario del Imam Ali Bin Talib, bajo cuya cúpula dorada se cobijan los insurrectos.
Los testigos, citados por canales de televisión árabes, indicaron que los militares norteamericanos, situados en posiciones de combate, llegaron precedidos por carros de combate y baterías de artillería ahora visibles desde la puerta del templo, el más sagrado para los más de 130 millones de chiíes que hay en el mundo.
El movimiento ofensivo de las fuerzas estadounidenses contradice los términos del acuerdo alcanzado el miércoles por Al Sadr con el Consejo de Gobierno interino iraquí, en el que aceptaba rendirse y salir de la mezquita a cambio de que los marines se retiraran de la ciudad santa.