Una ballena jubarte, de 10 metros de largo,  encalló este domingo, en una playa de la entrada de la Bahía de Guanabara, en  cuyas orillas se ubican las ciudades de Rio de Janeiro y Niteroi.
 
Unos 100 hombres intentaron devolverla al mar, pero hasta el inicio de la  noche no lo habían conseguido.
 
El coronel Marcos Silva, coordinador de las fuerzas especiales del Cuerpo  de Bomberos, estimó entre ocho y diez toneladas el peso de la ballena.
 
Unos soldados del Ejército de Tierra que estaban en la playa intentaron  ayudarla. "Estábamos realizando una instrucción e intentamos sacarla de la   arena, pero era muy pesada", dijo el teniente Eric Lessa.
 
"Tal vez ella salga sola, cuando la marea llegue a su altura máxima", dijo  una bióloga de la Universidad del estado de Rio de Janeiro,  (UERJ), llamada  para auxiliar en el salvamento de la ballena.