Familiares, allegados y amigos de la desaparecida cantante cubana exiliada Celia Cruz, la Guarachera de Cuba la recordaron este viernes, al cumplirse un año de su muerte, con una misa en la parroquia del Cristo Rey en La Habana.

El párroco de la iglesia, el padre José Baldrich, recordó a Cruz como “una persona especial” y fiel representante de la cubanía y para quien “la música fue la oportunidad de universalizar los ritmos cubanos”.

Conocida mundialmente como la Guarachera de Cuba o la Reina de la Salsa, Celia Cruz murió en su casa en Nueva Jersey (EE.UU.), víctima de un tumor cerebral, tras desarrollar una larga y triunfal carrera artística.