El semanario "Zeta" pidió hoy "una investigación que lleve a la captura de los asesinos" del periodista Francisco Javier Ortiz Franco, fundador y editor de la publicación muerto a tiros hoy en Tijuana, en el norte del país.
 
La publicación pidió "enérgicamente a la Procuraduría de Justicia del Estado, a la General de la República y a los gobiernos estatal y federal" que investiguen a fondo para tratar de aclarar el crimen.
 
"El Consejo Editorial de Zeta no señala sospechosos ni establece hipótesis hasta no contar con los elementos debidos", dijo la publicación en su comunicado, en el que indica que es la Procuraduría la que debe de "informar pormenorizadamente, de inmediato, a la opinión pública sobre los detalles del crimen".
 
"Hemos recibido la promesa por escrito del Presidente de la República y el ofrecimiento verbal del Gobernador del Estado (de Baja California, Eugenio Elorduy,) para aclarar el caso. También de la PGR que se sumará a las investigaciones del fuero común. Exigimos el cumplimiento a sus ofertas", añadió la nota.
 
Relató cómo en el momento de ser acribillado a trescientos metros de la Oficina de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Baja California, Ortiz Franco estaba acompañado por sus dos hijos, de diez y ocho años, que resultaron ilesos.
 
El periodista estaba sometiéndose a una terapia de rehabilitación física desde que el pasado día 14 sufrió una parálisis facial debida a la tensión.
 
La nota dedica palabras de elogio al periodista asesinado, quien también se había titulado como abogado en la Universidad Autónoma de Baja California.
 
"Fue fundamental en la creación del Consejo Editorial de ZETA. Dada su capacidad, por unanimidad del mismo Consejo se le seleccionó para escribir los editoriales. Su punto de vista siempre fue considerado como la postura definitiva del semanario", agregó.
 
La nota recordó que Ortiz Franco "participó en numerosas investigaciones periodísticas y trabajos informativos, tanto en lo individual como equipo".