El papa Juan Pablo II canonizó el domingo a cinco hombres y una mujer que se negó a abortar pese a saber que su vida corría peligro.
 
El Papa canonizó a la italiana Gianna Beretta Molla, una pediatra que murió en 1962 a los 39 años una semana después de dar a luz a su cuarto hijo. Los médicos le dijeron que de seguir adelante con el embarazo corría peligro su vida debido a un tumor en el útero, aunque la santa prefirió la vida de su hijo a la propia.
 
Durante la canonización, Juan Pablo destacó su   sacrificio extremo y su simple pero profundo mensaje.
 
Que nuestra era vuelva a descubrir, con el ejemplo de Gianna Beretta Molla, la pura, casta y fértil belleza del amor conyugal, vivido como respuesta del mandato divino, afirmó el ordinario de Roma.
 
El Vaticano dijo que el primer milagro atribuido a Beretta Molla fue el de una brasileña enferma que se recuperó en 1977 tras su cuarto embarazo. El Vaticano dijo que un segundo milagro ocurrió en el 2000, cuando nació un niño sano pese a que su madre brasileña había perdido su líquido amniótico.
 
Juan Pablo alabó además los ejemplos de otras cinco personas canonizadas el domingo, incluyendo dos sacerdotes italianos y un monje español fundador de una orden religiosa, un sacerdote maronita libanés y una acaudalada viuda italiana que brindó su casa para los niños desamparados.
 
Juan Pablo, que cumple 84 años el martes, leyó la totalidad de su homilía y pareció en buena forma ante los miles de peregrinos congregados en la basílica de San Pedro, bajo un sol radiante.
 
Entre los presentes se encontraba el presidente libanés Emile Lahoud, un católico maronita que acudió a Roma para asistir a la canonización de Naamatallah Kassab Hardini, un maronita que vivió de 1808 a 1858 y que según los milagros constatados por el Vaticano, curó a los invidentes y a los lisiados.
 
Hardini es el tercer maronita que alcanza la santidad entre los 900.000 maronitas libaneses, la mayor de las sectas cristianas del país.
 
Igualmente fueron canonizados este domingo Luigi Orione, un sacerdote italiano fundador de la Pequeña Obra de la Divina Providencia y de la Congregación de las Hermanitas, Misioneras de la Caridad; Hannibal Maria di Francia, fundador de la Congregación de los Padres Rogacionistas del Sagrado Corazón de Jesús y de las Hijas Religiosas del Divino Celo; el español Josep Manyanet y Vives, fundador de la Congregación de los Hijos de la Sagrada Familia de Jesús, María y José y de las Hijas Misioneras de la Sagrada Familia de Nazaret; y Paola Elisabetta Cerioli, una acaudalada viuda italiana que tras la muerte de sus cuatro hijos y de su esposo, fundó el Instituto de Religiosas de la Sagrada Familia.