El presidente del Episcopado brasileño y arzobispo de Salvador, Geraldo Majella Agnelo, sostuvo ayer que el “desencanto” cunde en la población por “las promesas no cumplidas” del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
“La población atribuirá a Lula la situación de miseria y desempleo que existe en el país”, dijo el religioso.