Con optimismo en nuestro presidente, coronel Lucio Gutiérrez Borbúa, escuché por televisión que los créditos en el Banco Nacional de Fomento se elevarán a $ 30.000, para que tengan acceso los artesanos y los pequeños y medianos productores.

La noticia concuerda con las aspiraciones de beneficiarnos con los servicios de nuestro BNF. Digo nuestro, porque es la única institución con color humano, lejos de la codicia que ha tocado fondo en las entidades que manejan la economía; esto lo afirman las tasas de interés en Ecuador que son unas de las más altas de Latinoamérica.

El Presidente ha pedido que se considere la rebaja de las tasas en los créditos, pero se han esgrimido leguleyadas y justificaciones sin argumentos digeribles. Ante este panorama respaldo dicho proyecto, que nos pondría a los pequeños empresarios a la altura de los países vecinos en la competitividad, requerida por el Tratado de Libre Comercio y el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas.

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Hagamos frente a este reto con equipos, tecnología de punta, créditos blandos a mediano y largo plazo.

Propongo que la Agencia de Garantía de Depósitos dé en comodato al BNF los cajeros automáticos que se incautaron a la banca cerrada, para que los clientes puedan acceder a un servicio más de nuestro banco ciento por ciento ecuatoriano.

Luis Alfonso Guerra Gudino
Sucumbíos