Aplausos, gritos y risas estruendosas. En la cabina de radio Canela se experimenta a diario un ambiente de fiesta, especialmente los viernes. Ese día se propician desde enfrentamientos musicales entre los personajes de la emisora, como el padre Beni Tocámelas y El Chico Sabroso, hasta concursos de chistes subidos de tono.

A diferencia de otras emisoras, en Canela no importa que los oyentes escuchen el alboroto. En el área donde se realizan las transmisiones no hay letreros que adviertan hacer silencio. Al contrario, la consigna es que todos –locutores, sonidistas, disc jockeys e incluso invitados– aporten con ocurrencias que a muchos dejan boquiabiertos, por estar cargadas de doble sentido. 

“Una sola vez sintonicé esa radio y me escandalizó. Eran las 10h00 y las bromas tenían connotaciones sexuales muy atrevidas”, expresa Sonia Solano, ingeniera comercial de 35 años. Su hermana, Magaly (32), opina igual. Pero, Carlos Rivas (26), chofer de una unidad de la Alborruta 1, dice que escucha Canela porque “ofrece buena música y me divierte”.

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Vilma Orellana, directora de la emisora, reconoce que lo que se dice y programa en Canela genera controversia. “Cuando adaptamos el tema Todo empezó, de Eddie Santiago, algunos protestaron porque Mari Contreras, otro de nuestros personajes, hacía referencia a las relaciones homosexuales. Talvez lo hace, pero eso queda a criterio del público”.

Agrega que también hubo reacciones cuando al adaptar la canción El vigilante (que es un tema peruano) le adicionaron los graznidos de un buitre. “Algunos miembros de la Comisión de Tránsito se quejaron, pero otros querían que les grabáramos el tema”.

Jorge Yunda, gerente de Canela, expresa que con los personajes y las adaptaciones musicales no pretenden ofender a la colectividad o a las instituciones públicas. “Solo queremos, con buen humor, entre bromas y sátiras, denunciar las coimas y dar voz a los que no la tienen”.

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Yunda es médico de profesión e integra  hace 18 años la agrupación musical Sahiro. Indica que en el 2003 adquirió la señal de Escándalo para crear   Canela “porque queríamos apoyar al artista nacional. Desde el nombre de la emisora es nuestro. La canela es un producto ecuatoriano”.

Otros personajes de la estación radial son Loro Mero, Palito Pesimenes y El Locutor Frustrado. Cada uno tiene una característica particular –Loro Mero, por ejemplo, no para de hablar– y son encarnados por los mismos locutores, quienes a través de ellos expresan lo que en ocasiones no se atreven a decir.

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“Queríamos salir de lo común. Por eso nuestras cuñas, spots y jingles son diferentes. Cuando Faruk Morán iba a integrarse a nuestro staff decíamos que era una persona de cuidado, pero solo para crear expectativa”, indica el locutor Ney Yunda. “Mis familiares me llamaron asustados para preguntar por qué me insultaban en Canela. Yo tenía que explicar que era parte de la promoción de la radio”, señala Morán, de 33 años.

MICRÓFONOS
MÚSICA
‘Qué tiempos aquellos’, conducido por Rafael Granja Bonilla, y ‘Terapia intensiva’, por Faruk Morán, son dos de los programas de Canela, una emisora que mayormente ofrece música de variado género, en especial tropical, salsa, tecnopaseíto y vallenato.

INFORMACIÓN
“En la radio ofrecemos muy escasa información y cuando lo hacemos solo damos noticias positivas”, explica Jorge Yunda, gerente de Canela.

CONCIERTOS
Otra de las actividades de Canela es la realización de conciertos. El próximo 1 de mayo, a las 21h00, presentará en el Jardín de la Salsa el Festival de la música chicha.

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