El representante del Ministerio Público acusó a los supuestos desaparecidos como coautores.

Al cierre de la instrucción, el fiscal Héctor Vanegas emitió, ayer, dictamen acusatorio en contra de Seydi Natalia Vélez Falcones y de los tres supuestos desaparecidos, como coautores del presunto robo en Fybeca.

El representante del Ministerio Público acudió al Palacio de Justicia, a las 11h50, y entregó al juez suplente Manuel Vélez, del Juzgado 2º de lo Penal, el dictamen y los 16 cuerpos de la instrucción que inició el pasado 20 de noviembre, un día después de la balacera que supuestamente frustró ese robo en la farmacia y que dejó ocho fallecidos, como indicó el parte de la Policía.

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Rodeado de camarógrafos, fotógrafos y periodistas el fiscal ingresó al despacho del juez y tras exponer someramente lo que decían las 48 fojas del documento confirmó que hubo robo. Como detalle, “porque un delincuente huyó con la billetera del cliente Gustavo Armando Villavicencio Romero y parte del dinero de las ventas en la farmacia”.

En la conclusión de su opinión, Vanegas refirió que “se ha probado la materialidad de la infracción (robo)”. Y acusó en el grado de coautores a Seydi Natalia Vélez Falcones, Erwin Daniel Vivar Palma, César Augusto Mata Valenzuela (a) Dientón, Johnny Gómez Balda y Fabricio Alexander Vinces Menéndez.

De este último indica que “aparece como titular del teléfono 098157474, sin que hasta la fecha se haya establecido por qué lo tenía Johnny Gómez para su uso personal, lo que evidencia que él permitía que Gómez lo usara, y por lo tanto era parte de la banda”.

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Acusó también a Iván Stalin Mata Valenzuela (hermano de César Mata) como cómplice.

“Es evidente que la materialidad de la infracción referente al robo agravado denunciado se encuentra probada ya que en el expediente constan la versión de algunos de los imputados, de los testigos, de los ofendidos, señalando la participación de Seydi Vélez y de los delincuentes muertos, José Vicente Cañar Reyes, Jazmany Alexander Rosero López, Raúl Javier Salinas Chumancero, Miguel Ángel Quispe Portilla, Richard Gonzalo Tello Jácome y Henry Germán Aguiar Vargas, en la infracción”, indicó.

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Dijo Vanegas, y lo relata el dictamen, que “además constan las experticias que prueban la existencia material de las armas utilizadas para realizar el asalto y el lugar donde este ocurrió, así como los bienes sustraídos a los ofendidos: Eticfar S.A., Gustavo Armando Villavicencio Romero (cliente), Wendy Mariela Gómez Paredes y Martha Magdalena García Pincay (empleadas de Fybeca)”.

Agrega el hecho de que Seydi Vélez Falcones fue detenida infraganti cuando trataba de huir. “Y si bien es cierto que no lograron robar todos los bienes que se habían sustraído, por la oportuna incursión de la Policía que neutralizó a parte de la banda y detuvo a Vélez Falcones”.

El fiscal relata que, como lo afirmaron los testigos, Juana Villacís Carvajal y Leonardo Ocejos Peralta “uno de los ladrones escapó por la puerta lateral de la farmacia en el momento que incursionó la Policía por la puerta principal. se llevó la billetera de Gustavo Villavicencio Romero, y parte del dinero de la venta de la madrugada en la farmacia”.

“Está claro que solo cinco miembros del GIR (dirigidos por el mayor Eduardo González) fueron los que dispararon al interior de Fybeca y neutralizaron a los ladrones”, dice el documento.

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En la instrucción “se probó que quien disparó contra Carlos Andrade Almeida fue el cabo Walter Castillo Yaguana. No se ha podido establecer quién fue el autor de los disparos contra Guime Córdova Encalada, presumiéndose que podría ser el policía Héctor Fruto Márquez”.

PROCESO
28 DE NOVIEMBRE
Nueve días después de ocurrida la balacera en que murieron ocho personas, el fiscal Héctor Vanegas reconoció el lugar del suceso. Rafael Esteves, defensor de las viudas, indicó que la diligencia “debió haberse hecho inmediatamente”.

2 DE DICIEMBRE
El inspector general de la Policía, Marcelo Vega Gutiérrez, presentó en el cuartel Modelo su informe sobre el caso, reconociendo que los 20 policías que participaron en el operativo procedieron mal e hicieron uso irracional de la fuerza y de las armas.

Al día siguiente, la 2ª Corte Distrital de Policía ordenó la detención de los uniformados, quienes aún siguen presos.

18 DE DICIEMBRE
El departamento de Criminalística de la Policía Judicial entregó al fiscal Vanegas el análisis de las armas de los policías. El informe determinó que el disparo que mató al cliente Carlos Andrade Almeida salió del arma del gendarme Walter Castillo, y que las armas de los delincuentes no fueron disparadas.

5 DE FEBRERO
La Veeduría de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción determinó en un informe que “los fallecidos fueron ejecutados”.