Michael Eisner fue separado el miércoles del cargo de presidente de Disney, pero conservó el rol de presidente ejecutivo pese a que el 43 por ciento de los accionistas votó en contra de su reelección en una ola de protestas sin precedentes.
 
Reunido en Filadelfia tras un tormentoso encuentro anual, el directorio de Disney DIS.N dijo que había elegido al ex senador estadounidense George Mitchell como el nuevo presidente de la compañía. La firma aseguró que Eisner, de 61 años, cuenta con el respaldo de la empresa pese a que una votación entre los accionistas pareció cuestionar su liderazgo.
 
La votación sorprendió al mundo corporativo estadounidense y marcó la protesta más fuerte de la historia contra un presidente ejecutivo, indicando que la remoción de Eisner como presidente no conformará a los accionistas que impulsan su salida.
 
Calpers, el mayor fondos de pensiones publicas de Estados Unidos, dijo que el "sorprendente" resultado de la votación mostraba el alto nivel de frustración de los inversores frente a Eisner.
 
"El descontento es muy grande y muy profundo en el mercado y nos ha llevado a creer que Eisner debería irse", declaró Sean Harrigan, presidente del directorio de Calpers, el sistema de pensiones públicas de California.
 
El directorio de Disney admitió que algunos accionistas querían la ida de Eisner, pero se mostró seguro de que los resultados financieros del gigante del entretenimiento convalidarían su apoyo a la gerencia y a la actual estrategia.
 
"Se hizo especial hincapié en la separación entre las funciones de presidente y presidente ejecutivo", dijo Disney en un comunicado.
 
Dos ex directores de Disney, Stanley Gold y Roy Disney, dijeron que seguirían luchando hasta que Eisner, cuyo contrato vence en el 2006, sea removido de su cargo.
 
Gold había dicho antes que Mitchell, que se desempeñaba como director independiente de Disney, no era el adecuado para el puesto de presidente luego de que el 24 por ciento de los accionistas votara en su contra.
 
Eisner brindó una entrevista al canal propiedad de Disney ABC, donde dijo que planeaba permanecer en el cargo de presidente ejecutivo al menos hasta el fin de su contrato en el 2006.
 
"Mi intención es cumplir el contrato", dijo Eisner, que señaló que la separación de los cargos obedeció a una exigencia de los accionistas.
 
Eisner ha sido criticado por el desempeño de las acciones de Disney a largo plazo, por los bajos índices de audiencia de la atribulada cadena televisiva ABC y por lo que sus detractores consideran su mal manejo de un nuevo acuerdo de distribución con Pixar Animation Studios Inc. PIXR.O    Comcast Corp. CMCSA.O, el mayor operador de cable de Estados Unidos, exhortó al directorio de Disney a sentarse y reconsiderar su oferta de adquisición de 49.000 millones de dólares, que el directorio de la firma y Eisner rechazaron por ser demasiado baja.   
 
COSMETICA
 
Analistas ya habían anticipado que Disney separaría a Eisner del cargo de presidente, pero muchos dudan que esa decisión sea suficiente para calmar a los inversores.
 
"No, no, no. Eso para mí sería algo cosmético o una respuesta técnica", dijo Charles Elson, director del Centro Weinberg en la Universidad de Delaware.
 
"Tiene que haber un cambio en la gerencia en uno u otro sentido", dijo en un comunicado Alan Hevesi, contralor del estado de Nueva York.
 
Pat McGurn, portavoz del Institutional Shareholder Services, un influyente grupo que lidera la campaña contra Eisner, dijo que la separación de los cargos sólo marca un primer paso en el camino de reformas.
 
"Si creen que esto es el final, se están engañando a sí mismos" dijo.
 
Las acciones de Disney cerraron el miércoles con una baja de 0,41 por ciento a 26,25 dólares en la bolsa de Nueva York.