El actor y director Mel Gibson está sorprendido por la intensidad de la controversia que ha producido el próximo estreno de su película La pasión de Cristo, criticada por algunos líderes judíos como una obra que puede incitar al antisemitismo.
 
Gibson dijo que “esperaba cierta turbulencia porque cuando uno ahonda en religión y política –en las que la gente tiene sus creencias más profundas– siempre terminas agitando las cosas”.
 
El actor hizo estas declaraciones al ser entrevistado por Peggy Noonan para la edición de marzo de Readers Digest, que estará a la venta el 24 de febrero. La película se estrenará en Estados Unidos un día después, en el miércoles de ceniza.
 
“Pero fue una sorpresa recibir críticas mientras estaba filmando, y después varias voces importantes de la prensa –personas que no habían visto la película– verdaderamente ensuciando todo”, agregó Gibson.
 
La pasión de Cristo es la mirada de Gibson sobre las doce horas finales en la vida de Jesucristo. Basada en narraciones del Evangelio, y contiene diálogos en latín, hebreo y arameo.