Los dominicanos están listos para dar la bienvenida a 2004 y lo harán como ya es costumbre: en familia y a ritmo de merengue.
Un espectáculo gratuito, que espera reunir una gran cantidad de dominicanos y extranjeros, se celebrará esta noche en el Malecón, frente al mar Caribe, en Santo Domingo, para recibir al nuevo año.
Aquí, como ya es tradición, los dominicanos compartirán la fiesta con sus merengueros favoritos, entre ellos, Fernando Villalona y Toño Rosario, que los pondrán a bailar hasta entrada la madrugada del próximo jueves.
En este espectáculo tampoco faltará la pegadiza bachata, pues dos de sus principales exponentes, Yoskar Sarante y Elvis Martínez, también actuarán.
Esta noche habrá fiesta para todos los gustos, y los más adinerados podrán trasladarse hasta los exclusivos hoteles de Santo Domingo, que ya anunciaron sus ofertas musicales para la noche.
Además de estos conciertos, los canales de la televisión local han organizado una serie de presentaciones artísticas en vivo para complacer a los que decidan quedarse en casa.
Y es que, una gran parte de los dominicanos deciden esperar el año nuevo frente al televisor y en familia.
Para esto preparan la ya tradicional cena de fin de año que va desde un sancocho (un guiso de verduras, carnes y especias que se prepara en varias regiones caribeñas) hasta los platos típicos de esta época, como el lechón asado, pollo horneado y pastas.
Al igual que en la Nochebuena, en la mesa de los dominicanos, tampoco puede faltar la ensalada rusa, manzanas, golosinas y "telera", un pan típico de estas fiestas.
El toque festivo final lo pondrán los fuegos artificiales, que aun siendo regulados por las autoridades debido a las víctimas que han ocasionado en los últimos años, pondrán broche de oro al año que se ha ido y recibirán con luz y color al entrante.
Para garantizar la seguridad y prevenir accidentes, un gran número de policías y más de 100.000 voluntarios velarán para que todo fluya con normalidad en las principales calles y carreteras del país desde primeras horas del día, según informaron las autoridades.
Aunque la celebración de las fiesta navideñas se han visto empañada este año por la actual crisis económica que afecta al país, la gente no ha dejado de comprar regalos y alimentos para recibir al nuevo año.
La economía dominicana tuvo un buen desempeño económico de 1992 a 2000, pero experimentó una serie de perturbaciones externas a partir de 2001, tras los atentados del 11 de septiembre en EE.UU., y una aún mayor este año con la quiebra fraudulenta del Banco Intercontinental (Baninter).
La crisis económica se caracterizó este año por los altos niveles de inflación y una depreciación del peso frente al dólar estadounidense, lo que ha mermado el poder adquisitivo de la población.
El propio presidente, Hipólito Mejía, calificó la semana pasada como "difícil" el año que acaba, aunque auguró una mejora económica para el año que viene.
El debilitamiento económico coincidió con la crisis interna del oficialista Partido Revolucionario Dominicano (PRD), prácticamente divido por la decisión de Mejía de buscar la reelección en los comicios de 2004, a pesar del rechazo de algunos de sus compañeros de organización.