En el 2002 dio a conocer el libro Poemas, que editó la Casa de la Cultura de Machala.
La pintora orense Verónica Rivas Franco expone sus obras desde el pasado 12 de diciembre en Miami, en el Latin American Art Museum. La muestra permanecerá abierta hasta el próximo 4 de enero.
Publicidad
Quince obras, de mediano y grandes formatos, integran la exhibición y el tema que plantea en ellas es la biodiversidad. La pintora es una apasionada defensora de la ecología. “Con mis obras pretendo crear conciencia de nuestro deber por conservar el ecosistema”, comenta Rivas, de 41 años y madre de cuatro hijos, quien en 1980 obtuvo el título de Miss Ecuador.
La ex reina, que también incursiona en la poesía, tiene como temática recurrente de su producción pictórica la naturaleza. “Mi obra está dedicada a todos quienes poseen la capacidad de conmoverse por la vida, expresada en miles de otros seres que conviven con nosotros y apenas si hemos empezado a conocer, y a quienes aún no se han permitido descubrir que la poseen”, refiere.
Publicidad
La que presenta en Miami es su exposición individual número 12. La primera la inauguró en 1989, en la Casa de la Cultura, Núcleo de El Oro. En el año 2000 expuso en el Consulado General del Ecuador en Nueva Jersey, y en el 2002 participó en la Primera Semana Ecuatoriana en Miami.
Cursó estudios en la Escuela de Pintura y Escultura Goya y en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Madrid, España.
Rivas pinta desde su época de colegiala. Era la más destacada de la clase de dibujo y pintura, pero entonces solo era una afición, que más tarde tomó como oficio. Ahora dedica su tiempo a la pintura, a la escritura, a su hogar y a sus hijos, de 15, 9 y 7 años, que viven con ella en esta ciudad. El mayor, que tiene 22 años, estudia en Monterrey, México.
En el 2002 publicó el libro Poemas, una edición de bolsillo que editó la Casa de la Cultura de Machala. En él habla del amor y el desamor. Rivas realizó talleres de literatura con los escritores Aminta Buenaño, Maritza Cino y Carlos Béjar Portilla.
Este último fue quien la incentivó a que publicara sus textos.
De su etapa de Miss Ecuador, Rivas conserva buenos recuerdos, pero dice que su interés fue siempre desarrollarse además en otras áreas, para dejar atrás el estigma que hasta hace poco pesaba sobre las reinas de belleza y que, afortunadamente, manifiesta, se ha empezado a diluir: de que las reinas de belleza solo podían ser reinas.