La bicentenaria casa donde nació el poeta chileno Pablo Neruda, premio Nobel de Literatura en 1971, finalmente desapareció hace una semana, bajo el ímpetu de cuadrillas que demolieron restos de muros, pisos, puertas y ventanas que sobrevivieron una década.
"Faltó el dinero" para mantenerla como reliquia, dijo Joaquín Caroca, el alcalde de Parral, el pueblo del sur de Chile donde el vate llegó al mundo el 12 de julio de 1904.
El actual dueño del predio, Nelson Rocky, pedía 500 millones de pesos (800.000 dólares) por transferir la propiedad al municipio. Esa suma es equivalente a la mitad del presupuesto anual del municipio.
Ahora, Rocky ofrece vender los escombros en 50 millones de pesos (80 mil dólares), pero la suma es igualmente difícil de conseguir, se lamentó el edil en conversación telefónica con la AFP.
Por años, la municipalidad buscó recursos para convertir la edificación en museo, pero no tuvo éxito.
"Queríamos parralizar a Neruda y nerudizar a Parral", buscando contribuir al acervo cultural, según Caroca.
En una primera demolición dispuesta por Rocky para construir su vivienda propia en el terreno, cercano a la frondosa Plaza de Armas del pueblo, las picotas y palas acabaron con gran parte de la vivienda, recordó el alcalde.
Los restos de la segunda demolición, completada el jueves pasado, son maderos y tablas, bases de piedra, pilares de un alero, puertas y ventanas, que quizá podrían servir para colecciones nerudianas, si alguien se interesara, agregó.
La casa, de tejas de arcilla hechas a mano, tenía al menos 200 años y se ubicaba al borde de la ex calle San Diego, rebautizada con el nombre del poeta en 1998, casi 30 años después de la entrega del Nobel y pasado un cuarto de siglo desde su muerte el 23 de setiembre de 1973.
Abatido por un cáncer, Neruda ("Crepusculario", "20 poemas de amor y una canción desesperada", "Residencia en la Tierra, "Odas elementales"), murió en su casa de Santiago doce días después del cruento derrocamiento militar del presidente socialista Salvador Allende, amigo personal y admirador, compañero de antiguos combates sociales y políticos.
El poeta nació como Neftalí Reyes Basoalto, hijo de Rosa, una profesora modesta, y José del Carmen, un maquinista de trenes a vapor que recorrían el lluvioso sur chileno.
Con el seudónimo de Neruda, el escritor rindió homenaje a un homónimo literato oriental descubierto en la juventud, según contó alguna vez después de emigrar desde Parral.
Con la casa del poeta ya definitivamente por el suelo, a la ciudad natal sólo le queda el acta oficial de su nacimiento hace 99 años, señaló el alcalde Caroca.
El viejo papel manuscrito se guarda en una urna depositada en la sede municipal, en donde hace algún tiempo se construyó una réplica del la vivienda del nacimiento.
Para el ministro de Cultura, José Weinstein, "es una muy mala señal que a meses de celebrarse el centenario del natalicio del poeta, donde se está haciendo un gran esfuerzo para que su figura y su obra sean conocidas en Chile y el extranjero, el lugar de su nacimiento no haya sido conservado".