“Kofi Annan, help us (ayúdanos)”, decía un cartel que llevaba pegado al cuerpo Julio Gualotuña, un quiteño que llegó a las 08h35 de ayer hasta el hotel Hilton Colón de esta ciudad acompañado de su hijo, Carlos David, de 12 años, con el objetivo de pedirle ayuda al Secretario General de las Naciones Unidas para crear una fundación para niños.

Él quiso conversar con Annan antes de que viaje a Galápagos junto a su esposa Nane; el coordinador residente del Sistema de Naciones Unidas en Ecuador, René Mauricio Valdés; y el embajador del país ante la ONU, Luis Gallegos, y decirle que “aquí los niños se mueren de hambre y son maltratados, ojalá me escuche”.

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Pero los quince policías que custodiaban la entrada del hotel Hilton Colón de Guayaquil, donde se hospedó Annan durante su visita a esta ciudad, no le permitieron acercarse hasta la puerta de ingreso “por razones de seguridad”.

Gualotuña no perdió la fe y prefirió esperar junto a su hijo.

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El viaje del máximo representante de la ONU estaba previsto para las 08h50, pero hasta las 09h00 no salía del hotel. Un vehículo Mercedes Benz azul lo esperaba afuera para llevarlo hasta la Base Aérea Simón Bolívar.

La presencia de Gualotuña llamó la atención de Fernando Pachano, asesor técnico de la oficina de las Naciones Unidas, quien se acercó hasta él y le preguntó: ¿Cuál es el motivo de su presencia? Él le respondió que quería hablar con Kofi Annan sobre la realidad de los niños en Ecuador.

“Eso es imposible” , dijo Pachano y le explicó que estaban muy retrasados y que debían llegar al aeropuerto. “De todos modos le dejo mi tarjeta para que me llame”, agregó.

Treinta minutos después los guardias se apresuraron a retirar a toda persona que se encontraba cerca de la puerta del Hilton Colón para que Annan y su esposa puedan salir.

Los primeros en abandonar el sitio fueron sus colaboradores, quienes guardaban el equipaje de la familia Annan en el portamaletas del carro, mientras que Valdés y Gallegos, acompañados de sus respectivas esposas, se cercioraban de que todo esté listo para el viaje.

El líder de la ONU, quien lucía una guayabera blanca, un sombrero de paja toquilla y un pantalón habano, solo alzó su mano para saludar a la prensa, miró de lejos a Gualotuña y se marchó en el vehículo.

Desilusionado, Julio tomó de la mano a Carlos David y se marchó por la avenida Francisco de Orellana.

El acceso a la Base Aérea fue restringido por las autoridades. Luego de recibir los honores militares, Annan se dirigió al avión de TAME. Eran las 09h40.

EN SU VISITA

Comitiva
En la comitiva oficial que acompaña al secretario general  de la ONU, Kofi Annan, llegó la fotógrafa Stephanie Hollyman, pero la oficina de coordinación de la ONU contrató además al fotógrafo quiteño Guillermo Granja, pero se suspendió a última hora porque los visitantes quisieron privacidad.

Hospedaje
En Guayaquil y Quito, Annan y su esposa se hospedaron en las suites presidenciales de los hoteles Hilton Colón y Marriot, respectivamente. La tarifa llamada rac (o común) de esa habitación es de 1.800 dólares por noche, aproximadamente.

Traductor
El traductor oficial de Kofi Annan se llama Manoel de Almeida e Silva, pero no acompañó al visitante durante la declaración de Huésped Ilustre que hizo en su honor, el viernes pasado, el alcalde de la ciudad, Jaime Nebot. La secretaria personal de Annan, Tasa Delenga, recién llegó ayer al país.

En Galápagos
Es probable que los visitantes se hospeden en el hotel Delfín, en Santa Cruz. Según voceros de este organismo, Annan no dará entrevistas durante su estadía en las islas.