El presidente George W. Bush inauguró el pasado jueves las celebraciones del Mes de la Herencia Hispana en Estados Unidos con un homenaje póstumo a Celia Cruz, a quien llamó la reina de la salsa y con un elogio al estilo del cantante brasileño Alexandre Pires.
“Te recordamos”, dijo Bush acerca de la cantante -que falleció hace tres meses- en presencia de su viudo, Pedro Knight, una de las más de 200 personalidades del mundo hispano, asistentes a la ceremonia realizada en la Casa Blanca.
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“Alejandro, me gusta tu espíritu”, le dijo también Bush a Pires, quien cantó en portugués La chica de Ipanema, en la primera presentación de un brasileño en años en esta celebración, que para los presidentes de turno es una oportunidad de cortejar el voto hispano.
Pires, quien ha vendido más de 3 millones de copias de sus canciones en lo que va del año, pareció tenso al comienzo de su intervención. Y para disiparse respiró tan intensamente frente al micrófono que los asistentes soltaron una carcajada.
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“Mucha responsabilidad”, dijo Pires para luego gritar, “Brasil, aquí estoy”.