Un equipo de más 30 oficiales de policía está  investigando el robo del cuadro de Leonardo da Vinci "La Virgen del huso",  cometido el miércoles en el castillo de Drumlanrig, en el suroeste de Escocia,  informó este jueves la policía británica. 
 
La pintura robada formaba parte de la importante colección de arte del  duque de Buccleuch, una de las grandes fortunas de Escocia. 
 
Más de 30 oficiales de policía trabajan en esta investigación, declaró  Philip Stewart, inspector de la policía de Dumfries y Galloway, agregando que  los investigadores están recibiendo "una extraordinaria contribución" por parte  del público en lo que respecta a testimonios sobre el robo. 
 
La Policía, que analizaba el jueves un vehículo que habría podido ser  utilizado por los ladrones para huir, busca a cuatro hombres, dos de los cuales  se hicieron pasar por turistas y robaron el cuadro tras neutralizar a una guía  turística en el vestíbulo del castillo. Los otros dos, que fueron vistos a  bordo de un automóvil Volkswagen blanco, serían cómplices. 

El cuadro, un óleo de pequeño tamaño (unos 50x35 cm) empezó a ser pintado  en 1501 por encargo de Florimont Robertet, secretario del rey de Francia.  Representa a la Virgen y al niño Jesús junto a un huso. Existen varias  versiones de él: dos de ellas habrían sido realizadas parcialmente por el  maestro, entre ellas la que pertenece al duque de Buccleuch. 
 
Joya de la colección, el cuadro era exhibido en el vestíbulo del castillo  de Drumlanrig. 
 
"Se trata de un tesoro que mi familia ha poseido durante más de 250 años",  declaró Richard Dalkeith, hijo del duque de Buccleuch, agregando que la familia  está "conmocionada y consternada" por este robo. 
 
"La Virgen del huso" ha permanecido durante siglos en manos privadas y por  tanto se ignora cual sería su cotización en el mercado, pero los expertos  avanzan estimaciones de entre 25 y 40 millones de libras esterlinas  (aproximadamente 37 a 58 millones de dólares). 
 
Mientras prosigue la investigación policial, la compañía que asegura el  cuadro ofreció una recompensa, cuyo monto no fue precisado, a toda persona que  permita recuperarlo, según indicó un portavoz del duque de Buccleuch. 
 
Los especialistas señalan que los ladrones tendrán grandes dificultades  para vender un cuadro tan célebre.