Unas 4.000 personas debieron ser evacuadas de sus hogares, en la provincia argentina de Santa Fe (centro-este), a raíz de inundaciones provocadas por las lluvias de los últimos días, informaron este lunes fuentes oficiales de Defensa Civil.
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El gobierno provincial se mantiene en alerta sanitaria, agravado por el temor a un posible desborde del río Salado, que podría empeorar la situación en algunos barrios del noroeste de la ciudad de Santa Fe (476 km al norte), afirmó el ministro de Obras Públicas provincial, Edgardo Berli.
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"Recientemente se produjo el desplazamiento de una gran masa hídrica en el terraplén oeste de esta capital y debe resolverse rápidamente, especialmente porque el agua podría afectar numerosas viviendas", admitió el funcionario.
Por las inundaciones, fue interrumpido el tránsito en algunos sectores de varias rutas nacionales y provinciales, así como en caminos rurales, en tanto "hay un gran deterioro en los campos en el área oeste de la provincia", aseguró Berli.