Hollywood prepara una larga lista de celebraciones en honor de la personalidad centenaria más famosa, ahora que se aproxima el cumpleaños número 100 del actor y humorista Bob Hope.
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Su cumpleaños es el próximo 29 de mayo, fecha en la que este "tesoro nacional" para los estadounidenses que nació en Inglaterra tendrá que soplar las cien velas del pastel.
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Ese día la celebración será íntima, junto a su esposa Dolores, de 93 años, en su casa del barrio de Toluca Lake de Los Ángeles, de la que apenas sale dado su frágil estado de salud.
Pero incluso en su ausencia, Hollywood ha preparado todo tipo de homenajes públicos a esta figura ganadora de cinco Oscar aunque ninguno de ellos como actor.
La primera felicitación ya la ha recibido, con una nueva placa conmemorativa en el bulevar de las estrellas de Hollywood, donde ya tenía otras tres, pero esta con un significado especial al ser nombrado "ciudadano del siglo", algo nunca alcanzado antes.
"Es una lástima que Hope no haya podido asistir", reconoció el humorista Dennis Miller, presente en el festejo junto con otros amigos y actores, como Eve Marie Saint, Phyllis Diller o Kelsey Grammer, además de la hija mayor del homenajeado, Linda Hope.
"Pero incluso con buena salud tampoco hubiera asistido porque estaría animando a las tropas", agregó Miller.
La anécdota refleja el carácter de esta estrella, el que más veces presentó la ceremonia de los Oscar, en 27 ocasiones, sin conseguir ninguno como actor y el único veterano de guerra laureado por el Congreso estadounidense sin ser parte de las fuerzas armadas.
Un honor que refleja la labor de este humorista, cantante, bailarín, actor y presentador, más conocido como el "espíritu de las fuerzas armadas", que recorrió 45.000 kilómetros durante la Segunda Guerra Mundial para ofrecer más de 150 conciertos a los soldados.
Un ritmo de vida que se repitió durante la guerra del Vietnam e incluso durante la primera guerra del Golfo, cuando sus cerca de 90 años no le impidieron organizar por esas fechas una fiesta de bienvenida para unos 350 infantes de Marina.
Estos y otros aspectos de su carrera, como su popular pareja cómica junto con Bing Crosby, quedarán reflejados en el especial de dos horas que este domingo le dedicará la cadena de televisión NBC.
Bajo el título de "100 Years of Hope & Humor", la cadena quiere celebrar la relación más larga entre un artista y una cadena de televisión, en concreto 53 años, desde que en esta misma fecha Hope ofreciera su primer especial con NBC.
Además, los estudios Universal han sacado a la venta una colección de doce películas de esta estrella para recordar su obra, con más de medio centenar de títulos en cine.
Su nombre será recordado también de otro modo, ahora que la popular esquina formada por las calles Hollywood y Vine, considerada el corazón de esta fábrica de sueños, será bautizada como la plaza Bob Hope.
Además está programada una recepción en la sala de la Biblioteca del Congreso que desde el 2000 lleva su nombre, y otras calles serán rebautizadas con la palabra Hope tanto en su barrio de Toluca Lake como en la ciudad de Cleveland (EE.UU.), donde se crió.
Muy lejos está el recuerdo de que el verdadero nombre de este humorista es el de Leslie Towns y que su país natal es el Reino Unido.
En estos cien años, Hope se ha convertido en una institución estadounidense, el mejor reflejo de ese sueño americano que muchos antes y después de él han perseguido y que el ha hecho realidad.
Como ha recordado estos días uno de sus colaboradores y amigo, Mort Lachman, "su carrera no fue un accidente. El lo consiguió".
En la actualidad, a Hope le falla la vista y el oído para poder apreciar estos halagos, pero como confirma su hija Linda, que estará a su lado el 29 de mayo para cantarle el cumpleaños feliz, su padre "sigue siendo ese tipo corriente que sabe crecerse cuando la ocasión lo requiere".