Su vivienda, una villa de dos plantas ubicada en la ciudadela Entre Ríos, vía a Samborondón y construida con préstamo otorgado por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), la adquirió a la compañía Decor-util C. Ltda., en 1982. El inmueble está avaluado en 2.379 dólares.
Los dos autos son marca Peugeot. El uno, sedan, modelo 2002, está avaluado en 15.990 dólares y el otro, un sedan, de 1994, en 2.770 dólares.
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Además, posee una cuenta corriente en el Banco del Pacífico, que a la fecha de la declaración tenía un saldo de 10 mil dólares y un fondo de inversión para jubilación, en el Banco de Guayaquil (no consta la cantidad).
En el documento también se señala que Felipe Mantilla tiene cuentas por cobrar en el Banco del Progreso, en saneamiento, por honorarios profesionales, la cantidad de 30.000 dólares.
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Entre muebles bienes varios constan libros, enseres, equipos y electrodomésticos avaluados en 3 mil dólares.
Declara que no tiene deudas por pagar.
En su declaración jurada de bienes, Felipe Mantilla autorizó para que, si es necesario, se levante el sigilo bancario de sus cuentas.