Algunos de los principales grabados y xilografías de Alberto Durero se pueden ver desde ayer en Viena en una exposición que revela la riqueza y enorme calidad creativa con la que se convirtió en el genio alemán del Renacimiento y en maestro indiscutible de sus contemporáneos europeos. Los siglos XV y XVI, en los que vivió el artista germano (Nuremberg, 1471-1528), se conocen habitualmente como ‘la era Durero’.