La medida fue impuesta el 3 de diciembre del 2001 por el entonces ministro de Economía, Domingo Cavallo, para evitar una fuga de depósitos que terminara por colapsar el debilitado sistema bancario.
El ministro de Economía, Roberto Lavagna, anunció ayer que “a partir del lunes se levantan las restricciones. Ha costado casi un año llegar a este punto”.
Publicidad
El Gobierno mantendrá, sin embargo, el bloqueo que rige sobre un 35% de los depósitos a plazos fijos, denominado ‘corralón’.
Esta restricción, decidida por el presidente Eduardo Duhalde, es la que genera mayor malestar entre los ahorristas.
Publicidad
Además de ser congelados, los depósitos que eran originalmente en dólares fueron convertidos a pesos a una tasa de cambio mucho menor que la del mercado. Esa conversión representó para los ahorristas una pérdida de casi el 50% de su capital.
Los fondos liberados de las cuentas de ahorro y corrientes representan unos 5.700 millones de dólares, en tanto que los fondos atrapados en el ‘corralón’ se elevan a unos 4.275 millones.
Varios analistas explicaron que la liberación de las cuentas no tendrá un efecto importante, no se esperan un retiro masivo de fondos ni una variación importante en el mercado de cambios.