El Ministerio de Educación intervino y suspendió todas las actividades en el colegio Manuel J. Calle, hasta su reorganización total.
La decisión de los funcionarios significará el cambio de las autoridades y profesores, que serán reubicados en otros establecimientos.
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En la reunión, que se realizó el jueves pasado, Fausto Bravo, del departamento de Supervisión de la Dirección de Educación, dijo que analizaron la situación del colegio y como no llegaron a un acuerdo, decidieron que sea el Ministerio de Educación el que llegue a la solución. Mientras tanto, los alumnos estarán suspendidos hasta que se reorganice el plantel.
El problema se inició con la denuncia de Alfredo Almeida, del comité de padres de familia, quien exige la renuncia del rector del colegio, Jaime Guerrero, por presuntas irregularidades en la administración de los fondos recaudados en el alquiler del edificio para las ferias.
Un grupo de alumnos sigue apoderado del plantel.