Además de poseer una gran playa, el balneario es un sitio ideal para la práctica del parapente y buceo.
El balneario de Crucita celebrará sus 24 años de parroquialización el próximo lunes, en medio de aspiraciones y problemas, los que –a decir de sus habitantes– no los soluciona el Municipio de Portoviejo, pese a que sus autoridades dicen que es la consentida, La Bella.
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Crucita, La Bella, tiene fama mundial no solo por sus playas sino por ser el sitio ideal para la práctica del parapente, pues se lo considera como el segundo lugar en el mundo donde se puede practicar el deporte. La partida es desde el sector La Loma.
Tiene también lugares para buceo en zonas semiprofundas; posee el bosque seco protector, el manglar La Boca y muchas áreas rurales que atraen a los turistas.
Playa, el mejor regalo
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Quien llega a Crucita recibe como su mejor regalo la amplia playa. En el malecón todos los restaurantes lucen abiertos porque en esta época llegan visitantes de la Sierra.
Los alumnos de la escuela Ovidio de Crolly, de Ambato, llegaron la semana pasada y dijeron disfrutar de los encantos. “Estamos felices, el mar está chévere y lo que más nos ha gustado son las olas y el pescado que se come en los restaurantes”, afirmaron en coro las pequeñas Sofía, Susana y Victoria.
Agua de pozo
Pero la población tiene necesidades. La calle principal, denominada Portoviejo, es la única asfaltada. Francisco Reina, propietario de un restaurante, afirmó que a Crucita le falta de todo: “No existe un mercado donde hacer las compras, por eso la mayoría de los habitantes van a Charapotó, Correagua, Rocafuerte o Portoviejo”.
“Ni siquiera agua potable tenemos y eso que estamos a pocos kilómetros de la planta potabilizadora El Ceibal; la que aquí consumimos viene en tanqueros, es agua de pozo que viene desde Los Arenales”, agregó.
Hay expectativas
Reina comenta que el Municipio se comprometió a inicios de año a construir aceras y bordillos, “pero ya estamos en junio y no se ve nada de la obra, ni siquiera se preocupan de mejorar el malecón, que es donde se aglomeran los turistas en la época de feriados o vacaciones”, manifestó.
Mirella Briones, administradora del hostal Zucasa, señaló que pese a las deficiencias, Crucita ha cambiado en la última década, por la inversión de empresarios en ciudadelas, condominios y hoteles.
Ella destaca que existe interés por invertir en esta parroquia porque tiene una ubicación privilegiada, hay paz y tranquilidad. En Crucita tenemos una de las playas más grandes de Manabí y la plusvalía aumenta con el paso de los años, explicó Briones.
PROGRAMA
La cabecera parroquial de Crucita tiene 2.000 habitantes.
El balneario pertenecía al cantón Sucre; se lo parroquializó y anexó a Portoviejo en la alcaldía de Jacinto Kon, en 1978.
Desde entonces se convirtió en la playa de Portoviejo, aspiración que tenía la ciudad desde hace décadas.
Los actos por el aniversario se adelantan para mañana. Se hará un desfile cívico-estudiantil, que iniciará en el malecón a las 09h00.
La sesión solemne se cumplirá a las 13h00 en la escuela Juan Benigno Vela. En la tarde habrá programas deportivos y en la noche se desarrollará un baile popular, entre otros eventos.