No puede ser más expresiva la falta de respeto de muchos conductores de vehículos para con los peatones.
Es un mal “endémico”: conductores contra peatones. Por ello la ciudadanía se queja de que el tránsito, tanto vehicular como peatonal, es caótico, pues nadie respeta nada.

No vine al caso señalar quién o quiénes son los culpables, ya que conocemos perfectamente bien cuando el tránsito, al menos en Guayaquil, se vuelve caótico.

Todos decimos que es por la falta de educación, lo cual es cierto; y esto trae como consecuencia la falta de respeto de todos contra todos.

Publicidad

 Reclamamos leyes y reglamentos para organizar las diversas áreas o  actividades de la sociedad, pero una vez que las tenemos nadie las cumple y, quienes deberían ponerlas en práctica parece que no las conocen (lo cual sería gravísimo) o se hacen los que las desconocen (lo que sería peor).
Dr. Francisco Cucalón Rendón
Guayaquil