Una idea que Umbral, durante la presentación del libro, volvió a remarcar: “Yo había imaginado que Camilo José, después del Nobel (1989), se encerraría en su finca de Guadalajara, con un suéter gordo, a escribir las mejores cosas de su vida, pero resultaba que le tiraba la pajarita y la foto de ABC. Lo desperdició, le debió dar más grandeza”, dijo. Pero por este libro, que el autor madrileño escribió antes de que el Nobel muriese el pasado mes de enero, pasa el amigo, el maestro y el padre literario, sus libros, su infancia, la política, el dinero; en definitiva, las miserias y grandezas de un ser humano.
“Seguro que a él le hubiera aburrido leerse a sí mismo y me habría dicho algunas cosas que no le gustaban, como las referidas a su mujer, Marina Castaño; pero, claro, él estaba casado con ella, no yo”, recalcó. Aun así Umbral cree que, “aunque decían que fue censor, él no hubiera censurado nada de esto”. Aseguró que muchas cosas de las que aparecen en el libro ya se las había dicho a él en vida.
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