Más de tres décadas en la práctica del básquet y sigue en el deporte.

Son las 19h00 de un martes, cuando Eduardo Chong Qui podría descansar en casa luego de su jornada laboral que se inició a las 06h00. Pero no. Él desgasta sus últimas energías del día en el coliseo de La Salle.

Junto a viejos amigos del básquet como Ayub Sánchez, Richard Holguín, Mario Montevideo, David Aparicio y otros, anima un cotejo recreativo que no necesita la activación de muchas luminarias del sitio para hacerlo atractivo. Ese encuentro le permite relajarse y también alistarse para el torneo preparatorio de clubes que arrancó el pasado lunes en el Abel Jiménez Parra.

Publicidad

Luego de 35 años los rebotes de Chong Qui no se detienen y aunque hace casi un año anunció su retiro, los compañeros y personas cercanas le pidieron que continúe y así lo hace.

Desde que vino de Quevedo, donde apareció en torneos colegiales, Chong Qui solo encontró buenas amistades aquí y además pudo formar una familia en Guayaquil.

Publicidad

La práctica entre clubes en Guayaquil marcaba la diferencia con otras provincias y eso lo motivó, a fines de la década del 60, a abandonar Los Ríos y comenzar su carrera aquí.

“En mi provincia solo se jugaba al nivel de los nacionales interprovinciales, pero no se hacían torneos interclubes, en cambio, en Guayaquil sí”. De esta forma Chong Qui justifica su posterior participación como seleccionado de Guayas, porque antes no había restricciones por actuar en dos federaciones provinciales.

Pero al hablar del club que lo acogió primero solo reproduce añoranzas.
Fue el legendario equipo de Banco Central que “nunca más volverá a aparecer”. En ese plantel entregó lo mejor de su vida deportiva desde la década de los 70 hasta mediados de los 90.

Vivió momentos de gloria con los colores amarillo y negro que se combinaban con el icono inca del dios sol. Con esa camiseta alcanzó varios títulos nacionales interclubes, participó en ligas sudamericanas, donde se dio el gusto de ganar a un equipo brasileño y uno argentino e incluso en una edición logró ser el segundo mejor encestador de triples.
Considera que su mejor época fue de 1987 a 1989, “lamentablemente por problemas de la Federación Ecuatoriana de Básquet no hubo competencia internacional para el país en esos años”. Pero cuando desapareció la Asociación de Empleados del Banco Central, todo quedó en el recuerdo, sin embargo él siguió.

Y desde 1997 el club La Salle es su segunda casa. Ahí su presencia es singular. En varios partidos se lo ve dirigir, jugar, desesperarse cuando el marcador no es favorable, todo por la pasión de estar conectado al básquet.
Además por su afición a la canasta combina su trabajo con el básquet. Mantiene un equipo que lleva el nombre de Laboratorios Chong Qui, donde labora en las tardes, mientras que por las mañanas presta servicios en el área administrativa del Banco Central.

Y sobran energías para también enseñar la disciplina a los pequeños de colegio La Salle. “Eso me encanta”, por eso prefiere más la acción de instruir que dirigir equipos.

Sobre su familia, siente que ahora necesita dedicarle más, para recompensar los momentos que sacrificó por estar en la cancha, pero “siempre tengo el apoyo de ellos” y da gracias por todo lo que tiene.

Muy Personal

Nombre: Édison Eduardo Chong Qui Portilla

Edad: 45 años

Fecha y lugar de nacimiento: 5 de marzo de 1957, Quevedo, Los Ríos.

Casado con: Carolina Rosero. Cuatro hijos: Andrea (15), Carlos (8), Valeria (6), Cristóbal (5).

Peso: 155 libras

Estatura: 1,73m

Se graduó  como tecnólogo médico y químico farmacéutico.

Se inició deportivamente en el equipo de Banco Central desde 1970 hasta 1995. Luego pasó a clubes como Liga Deportiva Universitaria, Athletic y La Salle. Varias veces seleccionado de Ecuador.
Especialista en tiros triples.
Además, dirige un club de básquet que tiene el nombre de Laboratorios Chong Qui.