Un altar delineado con pétalos de flores en forma de sol es el marco sagrado en el cual se pueden mirar símbolos del abuelo fuego y del taita inti (sol), así como de la mama yaku (agua), el taita waira (viento) y la pacha mama (madre tierra).

Alrdedor del altar varios miembros de comunidades de varios puntos de Quito (La Argelia, Tumbaco, Kennedy, Comité del Pueblo, Puengasí) buscan recuperar y mantener vivas las tradiciones de los ancestros, dan gracias por sus favores. Luego levantan las manos al Hatun Pacha (para llenarse de buena energía).

Se trata de la ceremonia del fuego, con la cual el pasado sábado se celebró el solsticio de verano en el Parque Arqueológico Rumipamba, organizado por el Municipio de Quito. Previamente, danzantes y músicos habían participado con alegres bailes y canciones andinas.

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Gerardo Ramos, músico y gestor cultural, explicó que la ceremonia busca “pervivir la memoria milenaria de los primitivos habitantes de los pueblos de Quito”.

Muchos de los asistentes son parte de la Asociación de Música y Danza Andina y Popular del Ecuador, que desde 2000 han realizado estas ceremonias. Sin embargo, cuenta Ramos que desde hace tres años se logró realizarlo en un sector arqueológico de la capital. El Parque Rumipamba (Pamba de piedras). Este sitio fue descubierto cuando se buscaba hacer un plan inmobiliario en el lugar, ahora es un área patrimonial.

La ceremonia, que representa un agradecimiento al taita sol dador de vida y de calor, fue liderada por mama Marujita Paredes y taita Luis Calahorrano, del barrio de La Argelia.

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Taita Luis con un enorme churo marca el inicio de la ceremonia. Mama Marujita agradece las cosechas y los frutos, pide a la mama yaku purificar las vidas y al taita waira que se lleve los rencores y enfermedades, y traiga lo bueno. También hace una oración por la mamita tierra.

El grito de ¡Juyayay taita inti! (¡qué viva el padre sol!), retumba entre las ruinas. Un abrazo a sí mismos y luego a las personas que están más cerca cierra la ceremonia para pasar a una pamba mesa llena de frutos. (F)