Nuevos mercados, ideas innovadoras: Adaptándonos a una nueva realidad empresarial

Ante la actual situación que enfrenta el mundo y la crisis económica que ya vivimos, producto de la recesión por el COVID-19, tanto empresas y negocios como su personal tendrán que superar desafíos inéditos para reencaminar su productividad.Entre estos desafíos están: cambios en las preferencias de sus consumidores, desarrollo de nuevos productos, incorporación de modelos ágiles de trabajo, aparición de nuevos competidores, entre otros.Además, en este momento muchas organizaciones corren un alto riesgo de no contar temporal o definitivamente con algunos de sus colaboradores y/o ejecutivos que desempeñan posiciones claves; esto generaría la interrupción de la continuidad de las funciones estratégicas y un impacto en la producción de la compañía. De cara a este panorama, el teletrabajo se convirtió en un nuevo estándar laboral.Para una compañía el teletrabajo tendría varias ventajas como la posibilidad de la reducción de costos salariales o de mejorar su plantilla laboral, también existe el ahorro del gasto proporcional por el espacio que ocupa el empleado dentro de la empresa (electricidad, teléfono, internet, alimentación, suministros, entre otros).Por otra parte, el colaborador se ahorra una serie de costos (transporte, alimentación, ropa, tiempo, etc.) al trabajar desde el hogar. Sin embargo, la persona que realiza teletrabajo deberá solventar:Y a pesar de todo esto debe mantener sus niveles de desempeño adecuados.La empresa internacional Deloitte, dedicada a la consultoría y con 175 años de historia, asegura que ante los desafíos actuales las organizaciones necesitan un acompañamiento integral para responder estratégicamente a los distintos frentes. Por eso, los líderes requerirán incorporar nuevas competencias para manejar equipos a la distancia, así como la medición de la productividad y efectividad de la gestión, además de las reuniones virtuales.Según Deloitte, de esta manera se busca desarrollar nuevas habilidades que permitirán una rápida adaptación a los trabajos remotos con esquemas virtuales, porque las empresas necesitan continuar midiendo la productividad de su personal en este entorno laboral diferente.Para alcanzar este objetivo, las organizaciones deben contar con varias herramientas estratégicas como:De acuerdo a la consultora internacional Deloitte, que cuenta con oficinas en Ecuador desde 1966 y más de 250 profesionales al servicio de sus clientes, con estos instrumentos se podrán realizar los análisis requeridos en el momento actual, relacionados a la característica de cada negocio y las funciones ejecutadas por sus colaboradores; todo bajo estándares de confidencialidad y rigor estadístico.Bajo la óptica de especialistas, las empresas experimentan el fuerte impacto que tiene la crisis del coronavirus y deben responder rápida y apropiadamente para no afectar su continuidad en el mercado. Además, repensar de manera integral su actual modelo de negocio estudiando las competencias técnicas y conductuales claves requeridas para enfrentar la nueva normalidad.De ser necesario asesores expertos servirían de guías, como la empresa Deloitte Ecuador, que ofrecen la posibilidad de redefinir su propuesta de valor y permitir a la organización reinventarse ante las nuevas exigencias del mercado, a través de un plan estratégico repotenciado. (P)

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