La paternidad es un lazo afectivo y emocional establecido con los hijos y abarca varias funciones, como la responsabilidad en el crecimiento, desarrollo y protección.
El padre siempre es y será un paradigma, un ídolo a imitar, por lo que debe ser ejemplo de honestidad, integridad y respeto para sus hijos.
Padres: los héroes que no buscan aplausos
Es un imperativo en todo progenitor amar a sus hijos, sin imponer sus decisiones y creencias, siendo justo, comprensivo y ecuánime.
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Un modelo de padre es el que te dejó huellas de superación; el que te brindó hábitos, principios y buenas costumbres, el que estuvo junto a ti y te llenó de amor y protección en todos los momentos de tu existencia. No hay duda que ser padre es una de las experiencias más hermosas que nos da la vida.
Papá presente, aunque no siempre visible
La responsabilidad de un padre es aún más comprometida cuando por circunstancias de la existencia queda viudo y tiene que criar a sus hijos, enfrentándose a la angustia e impotencia de desempeñar doble función.
Es igual digna de admiración y reconocimiento la labor que desempeñan los tíos y los abuelos que han quedado a cargo de la crianza y cuidado de los niños y jóvenes, ya sea por el fallecimiento de los padres o porque han tenido que migrar.
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Los hijos son una bendición y como tales son merecedores de nuestro amor y cuidado, y anhelamos también que cuando lleguen a ser padres sean un buen ejemplo. (O)
José Franco Castillo Celi, psicólogo y médico naturalista, Guayaquil
