Estados Unidos aceptó formalmente un Boeing 747-8 valorado en 400 millones de dólares, donado por la familia real de Catar para ser el nuevo Air Force One. El traspaso fue anunciado en mayo de 2025, pero la entrega sufrió retrasos legales posteriores.

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La ceremonia formal de recibimiento marcó un paso importante, aunque el proceso para integrar la aeronave a la flota presidencial aún continúa. Se espera que sea sometido a análisis y modificaciones para adaptarlo a su nuevo propósito.

Los planes de Estados Unidos para el lujoso avión que obsequió Catar

De acuerdo con Luxury Launches, la Fuerza Aérea estadounidense recibió instrucciones para acelerar la modernización del avión para uso presidencial. Los trabajos incluyen la instalación de equipos secretos para garantizar la protección y control durante vuelos oficiales de alto nivel.

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Este proceso de remodelación podría costar cientos de millones de dólares y tomar varios años. La revisión también incluye eliminar cualquier dispositivo de espionaje, así como adaptar el interior para desempeñar funciones de comando y comunicación.

La donación catarí ha generado debate político en Estados Unidos. Algunos legisladores cuestionan su legalidad bajo las leyes que regulan los regalos de gobiernos extranjeros, mientras que la administración de Donald Trump defiende que aceptar el avión es una decisión económica favorable y un gesto diplomático.

Se espera que este avión sustituya temporalmente al actual Air Force One durante el mandato de Trump. Una vez que finalice, la aeronave podría pasar a manos de una institución federal o fundación presidencial para su conservación y exhibición.

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(I)