Esta tarde la jueza de la Unidad Civil del Azuay, Ximena Tapia, negó la Acción de protección interpuesta por tres bachilleres aspirantes a un cupo para la Universidad de Cuenca. Los demandantes pidieron la anulación del examen por una supuesta filtración del examen del área 7 que incluye las carreras de Ciencias Médicas.

La Jueza consideró que no hubo vulneración al Derecho constitucional a la educación por lo que el trámite de asignación de cupos continuará según el cronograma establecido para los más 8.201 jóvenes que rindieron el examen el pasado 31 de mayo para esta Área que incluye carreras como: Medicina, Imagenología, Laboratorio Clínico, Nutrición y dietética, Fisioterapia y Fonoaudiologia. 

Tras conocer la decisión el rector de la Universidad, Pablo Vanegas, se mostró tranquilo y aseveró que las investigaciones persistirán hasta determinar quién filtró el cuestionario al exterior. Para esto se apoyarán en la Fiscalía provincial en donde se investiga el presunto delito de Interceptación ilegal de datos. 

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En la denuncia colocada por Vanegas se incluye el nombre de 10 jóvenes que accedieron a las preguntas. Esto lo confesaron voluntariamente a miembros de la Comisión Investigadora de la Universidad en junio pasado según se indicó en una rueda de prensa la semana. 

Además Vanegas aseguró que durante la indagación también se acercaron dos padres de familia que admitieron que compraron el examen para sus hijos. 

Según el abogado defensor de la Universidad, Álvaro Méndez, los argumentos planteados por los estudiantes no tenían un sustento legal, pues durante las audiencias no se demostró que existió acción u omisión en contra de los postulantes. 

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Mientras que el abogado de los bachilleres presuntamente afectados, Andrés Flores, aseguró que apelarán el fallo porque quedó comprobado que el examen se filtró por WhatsApp estuvo en manos de algunos estudiantes dos días antes de que este se aplique. (I)