Al menos 45 legisladores se inscribieron para debatir en torno a la Ley de Fomento Productivo, Atracción de Inversiones, Generación de Empleo y Estabilidad y Equilibrio Fiscal, que ayer se discutió en primera instancia. El ponente Esteban Albornoz (AP), presidente de la Comisión de Desarrollo Económico, explicó que recibió al menos 200 observaciones.

Recordó los puntos relacionados con exoneración del impuesto a la renta por 12 años para las nuevas inversiones de sectores priorizados, de ocho años para las inversiones dentro de Quito y Guayaquil; y de hasta 15 años en el sector industrial de la zona de frontera. También habló sobre la remisión de intereses, multas y recargos tanto en el sector tributario, de aduanas, vehiculares y del Seguro Social. Esto significaría recaudar $ 774 millones en tributos y de $ 189 millones en el IESS.

Mauricio Proaño (antes de AP) pidió que dicha remisión se aplique solo a empresas que antes no se hayan beneficiado.

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María Mercedes Cuesta (FE) advirtió que en la remisión del IESS no se debería beneficiar a las empresas deudoras que habiendo descontado los aportes a sus empleados no los pagaron directamente al IESS, pues esto sería un delito penal.

Antes del debate, la presidenta encargada de la Asamblea, Viviana Bonilla (antes de AP), permitió la intervención de Israel Avilés, representante de agricultores deudores de BanEcuador, quien pidió la extinción de sus deudas.

Asambleístas partidarios del anterior gobierno rechazaron la remisión y los incentivos para empresarios, pues dijeron no era parte del programa de gobierno que ganó.

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Patricio Burbano (CREO) explicó que la propuesta es necesaria, debido a la irresponsabilidad y el despilfarro del gobierno anterior. El tema de remisión le dará un respiro al actual Gobierno, dijo Homero Castanier (CREO). (I)