Toda embarcación, vehículo, aeronave o cualquier medio de transporte está expuesto a emergencias. Ahora lo vive la armada argentina con el submarino ARA San Juan, que es buscado intensamente.

Ecuador, que tiene dos submarinos, también pasó en alguna ocasión por una situación de riesgo. Así lo afirma el capitán de navío Guillermo Donoso, comandante de Submarinos de la Armada ecuatoriana.

Un tripulante tuvo que ser llevado a tierra, luego de sufrir un problema de apendicitis, dice Donoso. "El tripulante presentaba dolor abdominal, fue evaluado por el enfermero dentro del submarino, pasaron 48 horas y seguía con el dolor, de inmediato se avisó y se atendió al tripulante", cuenta. 

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Esta emergencia ocurrió en septiembre pasado y el tripulante fue trasladado a la Base Naval de Salinas y posteriormente a un hospital. A criterio de Donoso, es la única alarma presentada. Sin embargo, afirma que pueden ocurrir otras como daños en los equipos eléctricos, averías en las celdas, fisuras y demás deterioros. 

Donoso recalca que lo esencial es actuar rápido y en equipo ante una alarma, reacción que a su juicio, fue ejecutada en aquella emergencia. "Hay que tomar en cuenta que se está en un medio que no es normal para el hombre y se debe tomar precauciones", puntualiza, pero aclara que el monitoreo y comunicación son importantes. 

Submarinos ecuatorianos

Ecuador cuenta con dos submarinos: Shyri y Huancavilca de tipo U209 con 40 años de vida, cuya propulsión es diesel eléctrica. Ambos fueron construidos en Alemania. La tripulación consta siempre de 10 oficiales y 35 tripulantes, entre ellos, enfermeros, mecánicos y demás especialistas.

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Las embarcaciones realizan sus operaciones durante 8, 20 y hasta 40 días, dependiendo de las misiones. Aquí efectúan controles contra el microtráfico, pesca ilegal y demás amenazas para el país. Inclusive una de ellas participó en la detención del buque chino en las islas Galápagos, en agosto. 

Los submarinos llegaron por primera vez al país el 5 de abril de 1977 y hasta el momento han tenido tres periodos de mantenimiento y modernización: 1980-1983 en Alemania, 1991-1994 en Ecuador y 2008-2014 en Chile. Se revisan los principales sistemas, equipos electrónicos, ingeniería, hidráulico y demás. 

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Se estima que su periodo de utilidad sea hasta los 50 años, es decir, 10 más. Frente a esto, Donoso indica "Cuando llegue a los 50 años es importante que se piense en un proyecto para adquirir más submarinos. Los actuales son buenos para el tamaño de nuestras áreas de control, dos nos ayudan, pero siempre es importante más", sostiene. 

Los submarinos tienen 60 metros de largo, 6 metros de diámetro y pueden navegar hasta 45 personas. Están diseñados para andar a una profundidad de 300, 400 y hasta 500 metros para no correr riesgos.

Donoso resalta que pasada esa profundidad, pueden haber problemas debido a la presión de agua, lo que provocaría una implosión. "Se puede partir el casco del submarino y la gente se ahoga", dice. Además, añade que la presión para un humano equivale a 50 atmósferas. 

Para el capitán de navío es esencial aplicar los siguientes controles antes que un submarino salga a su misión: primero que la tripulación esté sana, sin ninguna sospecha de enfermedad y, segundo que equipos y sistemas sean probados en puertos y que estén en buenas condiciones.

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Los submarinos tienen una velocidad mínima de 3 nudos (5 kilómetros por hora) y máxima de 25 nudos (40 y 50 kilómetros por hora). Navegan a una temperatura de 12 a 16 grados. 

El comandante de Submarinos de la Armada detalla que realizan controles las 24 horas del día a partir de que el submarino zarpa. La comunicación es una vez al día.

Actualmente, las embarcaciones están en el Puerto Marítimo de Guayaquil hasta una nueva misión para continuar controlando el área marítima.

Situación del submarino argentino desaparecido

El pasado miércoles en Argentina, desapareció el submarino ARA San Juan con 44 personas a bordo. Según Enrique Balbi, vocero de la Armada Argentina, la tripulación en el peor de los casos, tendría solo un día más de supervivencia. 

Para Donoso, este caso pudo darse por una avería interna, quizás por un problema en las baterías, aunque "Si no se ha afectado el casco, mamparos y (si) están a 200 metros y no tienen fisuras, pueden sobrevivir", dice. Aunque agrega que si el aire está contaminado, el problema es peor.  

"Tampoco se sabe si está asentado en el fondo y por qué no puede salir... o qué impide que no puede emitir la señal de emergencia", señala. 

Donoso manifiesta que países como Estados Unidos, Gran Bretaña y Noruega tienen medios para ubicar a submarinos como las sonoboyas: un sistema sonar ligero que se lanza para la búsqueda y detección de submarinos desde aeronaves militares. (I)