El presidente de Sierra Leona pidió, Ernest Bai Koroma, ayer ayuda urgente para la capital Freetown, donde más de 300 personas murieron por inundaciones y deslizamientos de tierra causados por las lluvias, al mismo tiempo que los rescatistas seguían buscando cuerpos, según AP.

La Cruz Roja dijo que lucha para rescatar a las familias enterradas bajo el fango que inundó sus casas, y varios cadáveres fueron extraídos con excavadoras en la comunidad de la colina de Regent, ayer.

Al dirigirse a la prensa en Regent, una de las áreas más afectadas por la inundación, el presidente Koroma no pudo contener las lágrimas cuando dijo: La devastación “nos abruma”.

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Mientras, según las autoridades, la cifra de muertos puede aumentar estos días. (I)