El intendente de Policía, Rafael Guerra, dijo ayer que desconocía a la persona que supuestamente habría pedido $ 6.000 para la reapertura del bar-restaurante El Colonial, que había sido clausurado después de hallarse un arma en su interior.
“No la he conocido en mi vida (a esa persona)”, respondió Guerra en radio Cristal, donde acudió ayer para referirse a la denuncia por extorsión que interpuso María José Salinas, hija de los dueños de El Colonial.
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Guerra aseguró que ha puesto una querella por la denuncia realizada por Salinas para que ella pruebe la verdad de lo dicho y para que la justicia determine quién está en lo cierto.
Los dueños de El Colonial señalan que el arma que fue motivo de la clausura era parte de la exhibición del establecimiento y estaba en desuso.
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Días atrás, Salinas explicó que a través de una intermediaria se pedía dinero para levantar la clausura puesta por la Intendencia de Policía.
El intendente dijo que no había persecución contra El Colonial, pues en el operativo en que se clausuró ese bar también se cerraron tres de la zona rosa, en el centro de Guayaquil.
Julio Quiñónez, gobernador del Guayas, dijo que desconocía de irregularidades cometidas por sus colaboradores. (I)