En el penal García Moreno hay desolación. La evidencia de que hace unas horas hubo actividad son las decenas de fotos de Personas Privadas de la Libertad (PPL) sonrientes colgadas en las paredes de los pasillos de ingreso a los cárceles Nº 1 y 2 de este complejo penitenciario.

Todo es silencio al caminar por los pasillos, el olor a humedad se vuelve insoportable. Un cuadro del Corazón de Jesús da la bienvenida al lugar inaugurado en 1879, cuando se lo bautizó como panóptico de Quito.

El panorama cambia al traspasar la puerta de rejas del pabellón B de la prisión en la que, hasta el martes pasado, vivieron unas 1.900 Personas Privadas de la Libertad (PPL), que fueron llevadas hasta el Centro Regional de Rehabilitación Social de Latacunga.

Publicidad

En las celdas aún permanecen objetos personales de los trasladados: guitarras, mochilas, ollas y cocinetas colocadas sobre sanitarios.

A medida que se interna a la prisión se perciben malos olores. A lo largo están las celdas de tres metros de ancho por cuatro de fondo donde coexistían hasta quince internos.

Juan Paz y Miño, cronista de Quito, dijo que cuando se concluyó de construir el panóptico, que luego fue llamado penal García Moreno, en honor al expresidente que ordenó su construcción, fue considerado el más moderno y vanguardista de la época.

Publicidad

“Se inauguró con 60 presos y cinco guardias. La obra estuvo a cargo del ingeniero británico Thomas Reed y fue concebida para 200 internos.

En la cárcel Nº 1 los PPL construyeron con sus manos cubículos apilados unos sobre otros para ganar espacio y permitir el ingreso de más gente. Ellos lo conocían como “sarcófagos”.

Publicidad

Pero no todos vivían en esas condiciones. En la cárcel Nº 3 no hay malos olores, allí se escuchan los gritos de los internos del Centro de Detención Provisional (CDP). Las paredes están pintadas de blanco y en ellas hay papeles con diversas ofertas de comidas preparadas o venta de electrodomésticos.

Afuera de la prisión el movimiento se ha reducido notablemente desde el traspaso. Eso inquieta a los comerciantes que ofertaban comida, víveres o el cuidado de celulares o correas prohibidas para el ingreso.

Al ser consultada sobre su futuro, una vendedora de salchipapas dijo que solo queda el CDP, “ojalá nos lleven a donde se reubiquen porque tenemos que trabajar”, dice.

Lino Proaño, jefe policial del Distrito de Quito, dijo que en los próximos días las autoridades darán a conocer a dónde será enviada la cárcel provisional.

Publicidad

Con eso, iniciará la rehabilitación del complejo penitenciario en el que se espera construir un hotel museo histórico y revitalizar el urbanismo del sector de San Roque.

Detalles
Penitenciarios

Personajes
En el penal también estuvieron expresidentes de la República como Eloy Alfaro y Lucio Gutiérrez y antes de ser presidentes Jaime Roldós y Osvaldo Hurtado.