El estupor crece cada día que pasa con los nuevos datos que se descubren tras el hallazgo de las tres jóvenes secuestradas durante una década y la detención de tres hermanos, uno de ellos, Ariel Castro, el principal sospechoso, acusado de secuestro y violación y a quien una jueza decretó ayer una fianza de 8 millones de dólares.