El padre Adelir Antonio de Carli intentó recaudar fondos sustanciales para la caridad a través de una idea poco convencional: atarse a 1.000 globos, pero las cosas no terminaron bien, pues se perdió en el aire.

De acuerdo a The Mirror, esto ocurrió en abril de 2008, cuando el sacerdote procuraba la recaudación de fondos para construir una capilla para camioneros en su parroquia.

Publicidad

El sacerdote trató de hacer una hazaña pero no lo logró | Foto: Captura

Una idea alocada

La singular idea constaba de atarse a 1.000 globos de helio y protegerse con un casco, un traje térmico de aluminio, ropa impermeable y un paracaídas.

El viaje comenzó en Paraguaná, que es una ciudad portuaria de Brasil y tenía previsto romper el récord mundial de 19 horas de vuelo en globo, mientras recaudaba fondos. Para el clérigo no era tan alocado, pues tenía una amplia experiencia en paracaidismo y en supervivencia. Además, recibía apoyo de varios aventureros.

Publicidad

Dos meses antes, el hombre de 41 años logró completar la misma acrobacia pero con 600 globos, en un viaje a 5.200 metros de altura. Lamentablemente no corrió con la misma suerte en su segundo intento.

Aunque en esta segunda ocasión, se equipó con un rastreador GPS y una radio. Logró informar al control aéreo sobre su ubicación durante ocho horas, pero luego de ese lapso, se desapareció por completo del radar, reseña Infobae.

A la zona acudieron aeronaves y equipos de rescate, pero no tuvieron éxito. Dos días después del evento, se encontraron varios globos flotando en el océano cerca de la última posición conocida del sacerdote.

Pasaron tres meses hasta que dos tripulantes de un remolcador consiguieron el cuerpo por casualidad mientras trabajaban en el mar. Fue identificado a través de pruebas de ADN.

(I)

Te recomendamos estas noticias