Cuando se trata de prevenir la diabetes, a menudo pensamos en restringir carbohidratos y azúcares. Sin embargo, existe un aliado nutricional sorprendente que puede jugar un papel crucial en la reducción del riesgo de esta enfermedad: los frutos secos.
El consumo moderado de una pequeña porción de estos bocadillos diariamente puede brindar beneficios significativos para la salud. Esto se debe a su alto contenido de grasas saludables, fibra, proteínas y una variedad de vitaminas y minerales esenciales que contribuyen a mantener un equilibrio metabólico y reducir la probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2.
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¿Qué frutos secos reducen el riesgo de diabetes?
Para maximizar los beneficios de los frutos secos en la prevención de la diabetes, el portal Druni recomienda incluir en tu dieta:
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- Ciruelas pasas: Una ración consta de cinco a seis ciruelas pasas.
- Arándanos deshidratados: Una razón diaria de arándanos deshidratados corresponde a 1/4 de taza.
- Pasas: Al igual que los arándanos, se considera que 1/4 de taza de pasas es una sola ración.
- Albaricoques secos: Ocho mitades de albaricoques secos constituyen una ración.
Estos frutos pueden incorporarse fácilmente a la dieta como aperitivos por sí solos. Aunque se usan con frecuencia en la repostería e incluso como un sustituto al azúcar, también se pueden agregar a ensaladas, platos de avena cocida y yogur.
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¿Qué otros beneficios tienen los frutos secos?
Más allá de su contenido rico en fibra, las frutas deshidratadas también contienen :
- Antioxidantes: Estos compuestos protegen las células del daño y reducen la inflamación, lo cual es fundamental para controlar la diabetes.
- Bajo índice glucémico: Muchos frutos secos tienen un bajo índice glucémico, lo que significa que liberan glucosa de forma gradual en el organismo.
- Grasas saludables: Las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas presentes en los frutos secos ayudan a mejorar el perfil lipídico y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
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