Seguro puede parecernos un acto de buena fe alimentar a animales silvestres con los mismos alimentos o golosinas que consumimos. A muchos incluso le parece gracioso o irrelevante.
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Pero ¿Qué pasa si damos un trato humanizado a la fauna silvestre?. Resulta que los animales se desenfocan en su rol natural, pierden su instinto de supervivencia, sus habilidades para alimentarse, sufren por la adicción a alimentos procesados, caen en cuadros de agresividad y transmiten enfermedades.
La advertencia forma parte de una campaña ‘Con respeto y de lejos mejor’, lanzada en Venezuela para contener la mascotización de especies silvestres y alertar sobre el terrible tráfico ilegal de fauna.
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Explica el Ministerio de Ecosocialismo de Venezuela que al dar un trato humanizado a los animales silvestres resulta prácticamente imposible reinsertarlos en su hábitat natural. Esto afecta su ciclo de vida y se provocan desequilibrios en los ecosistemas.
“Estas, son las razones por las que el Ministerio del Poder Popular para el Ecosocialismo impulsa una campaña formativa denominada ‘Con respeto y de lejos mejor’, con el fin de educar y generar conciencia sobre el impacto de las acciones humanas en las más de 5.380 especies de fauna silvestre que existen aproximadamente en Venezuela”, indica una nota de prensa.
La campaña “Con respeto y de lejos mejor” subraya “que el verdadero amor hacia nuestra fauna silvestre, se cultiva respetando su espacio natural y denunciando el trato humanizado”.
En Venezuela hay 12 zoológicos del país. Estos lugares lejos de ser concebidos como depósitos de animales, “son centros de protección, resguardo y conservación de especies provenientes del trato humanizado, tráfico o cautiverio ilegal en su mayoría”.
Además, “son espacios para la formación de profesionales especializados, para la educación ambiental y la investigación científica”.
“Siendo una tarea del vértice 5 de la Gran Misión Madre Tierra Venezuela como es: Fauna para la Vida, esta campaña espera alertar a la población sobre la visión errónea de algunos, al ver a la fauna silvestre como mascotas, ofreciéndoles alimentos de consumo humano en zoológicos, áreas naturales y urbanas”, agrega el Ministerio de Ecosocialismo.
Esta campaña pone de ejemplos lo ocurrido con las guacamayas en Caracas, donde los pobladores suelen alimentarlas. Resulta que estas aves “han desplazado al autóctono loro caraqueño”.
Lo otro lamentable es que las guacamayas en Caracas “buscan alimentos de consumo humano y que en ocasiones mueren debido a que chocan con ventanales o enredadas en el cableado eléctrico”.
Otro caso reciente y viral en la red social TikTok, fue la invasión de monos capuchinos a una comunidad de Caricuao, en Caracas, siendo notoria su agresividad, gracias a la adicción por los alimentos procesados.
Esta población fue atendida por los equipos Biodiversidad Biológica y Fiscalización del Ministerio del Poder Popular para el Ecosocialismo.
La autoridad ambiental en Venezuela desarrolla a la par, acciones contra el trato humanizado, tráfico y cautiverio ilegal de especies, devolviéndolas a su hábitat natural o en el caso que no estén aptas para volver a sus ecosistemas, se resguardan en los zoológicos. (I)