Trasladar el actual camal municipal, ubicado en el barrio Cuba, fuera de la zona urbana es una de las prioridades del Municipio de Guayaquil al no contar en la actualidad con instalaciones que cumplan con el 100% de las exigencias.

Este centro de faenamiento, en el que se sacrifican al mes unas 5.500 vacas y unos 7.000 cerdos, provee de carne a la urbe y cantones cercanos donde no hay un matadero público habilitado, como Durán.

Para viabilizar el traslado, el Concejo Cantonal tramita un proyecto de concesión del nuevo centro de faenamiento municipal que se tiene previsto construir en al menos 1 kilómetro de zonas residenciales, como lo establece el manual de habilitación de mataderos, de Agrocalidad, entidad del Ministerio que habilita los camales.

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El 18 de julio pasado, se desarrolló el primer debate sobre este proyecto que busca entregar el servicio de faenamiento a una empresa nacional o internacional que tendrá que construir el nuevo centro y operarlo. Según el cabildo, la inversión inicial será de $ 26 millones.

“Esto se dará a través de concurso público..., abiertos a la posibilidad de tener a la mejor empresa con la máxima experiencia en este tema”, indicó la alcaldesa, Cynthia Viteri, en el primer debate de este proyecto, cuya votación obtuvo 14 intenciones a favor y una abstención.

La concejala Lídice Aldás se abstuvo de votar, porque, dijo, le preocupa la estabilidad laboral del personal del camal.

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“¿Qué va a pasar con aquellos funcionarios que existen ahí?”, dijo la edil, del movimiento correísta Fuerza Compromiso Social.

Viteri aseguró que la concesión contempla que los empleados que laboran actualmente en el camal del barrio Cuba continuarán con sus funciones en el nuevo centro, con el que se espera mejorar la calidad del producto faenado. En ese local laboran 112 personas (áreas operativa y administrativa).

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Con este nuevo centro de 14 hectáreas, el Municipio buscará la certificación de buenas prácticas que otorga Agrocalidad. En la actualidad solo tres de los trece centros municipales que funcionan en Guayas cuentan con esa acreditación. El resto figuran como activos.

En un recorrido realizado por este Diario a varios cantones, se evidenció el faenamiento de reses en patios o al pie del río, como en Jujan.

La Prefectura del Guayas tiene entre sus competencias intervenir en prevención y mitigación en casos de contaminación ambiental. La viceprefecta, Susana González, reconoce los problemas de contaminación generados por camales con deficientes condiciones.

“Tenemos en agenda la preparación de una guía para gestión ambiental de los centros de faenamiento del Guayas, la inspección ambiental a esos centros”, indicó González.

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Ubicación

EL UNIVERSO conoció que el nuevo camal se construiría en el sector conocido como El Chorrillo, en la vía a Daule, en el noroeste de Guayaquil. Según el departamento de Prensa del cabildo porteño, se espera que el segundo debate de este proyecto se realice el jueves 1 de agosto. (I)