(Actualizado a las 21:15)

Un radar de vigilancia secundaria instalado en Guayaquil y que ayuda en el control del espacio aéreo ecuatoriano estaría averiado.

El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, señaló la mañana de este miércoles que conoció de ese "problema serio" a través de un alto funcionario de la Aviación.

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"El radar en su sección de respaldo está dañado. Aparentemente cuesta 3 ó 4 millones de dólares repararlo y no se lo hace y eso nos llevaría a la conclusión de que si hay una falla en el sector principal y no tienen reemplazo porque está dañado se queda el espacio aéreo sin control", dijo Nebot.

Nebot señaló que hablará con el ministro de Transporte, Jorge Hidalgo,  para que verifique esa situación y se proceda a la inmediata reparación porque no solo es un tema que involucra a Guayaquil, sino al Ecuador.

En respuesta, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) publicó la noche de este miércoles un boletín en el que señaló que, de fallar un radar secudario en Guayaquil, su personal de Control de Tránsito Aéreo tiene un plan de capacitación permanente para proveer servicio de manera convencional, mediante cálculo y control de tiempo para el desarrollo de las operaciones aéreas con seguridad.

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“En el caso de presentarse una afectación, esta sería bajo los 7.500 pies, en la zona del Aeropuerto de Guayaquil, y el aterrizaje de las aeronaves se daría mediante procedimientos manuales”, explicó la entidad.

La DGAC agregó que en Guayaquil, “todos los servicios se brindan sin interrupciones”.

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Los radares permiten disponer de información sobre las naves que se encuentran en vuelo y tener el seguimiento sobre la posición de cada nave, su identificación y altitud.

Un controlador de tráfico aéreo consultado explicó que esos instrumentos ayudan al control de gran parte del espacio aéreo nacional, aunque precisó que hay planes de contingencia para situaciones en la que deje de operar un radar. (I)