Estados Unidos da pistas del avión del juicio final concebido para operar como un Pentágono en el aire si la tierra colapsa

“Un Pentágono volador”. Del sucesor directo del avión E-4B Nightwatch, el E-4C SAOC, ya se tiene información. Genera curiosidad saber de estas aeronaves porque son consideradas parte de la familia de “ aviones del juicio final”, que, para los Estados Unidos , “garantiza la continuidad de mando incluso en el peor escenario”. En el medio Xataka informan que hace poco tiempo, “un gigante basado en un Boeing 747-8, despegó por primera vez desde Dayton, Ohio , inaugurando una campaña de ensayos que se prolongará en los próximos meses y que abre la transición hacia una flota más moderna”.De los “aviones del juicio final” se dice que “están diseñados para ser el último recurso en un escenario donde todo se derrumba, operando como un verdadero Pentágono volador”.El SAOC (Survivable Airborne Operations Center, Centro de Operaciones Aerotransportadas de Supervivencia) es destacado en Xataca como el proyecto más ambicioso de la Fuerza Aérea para reforzar su red de mando, control y comunicaciones nucleares.En Estados Unidos tienen, al parecer, activos, 4 aviones E-4B Nightwatch, que entraron en operaciones en la década de los años 70, sobre la base de un Boeing 747-200.Según Xataka, esas aeronaves están en la Base Aérea de Offutt, Nebraska.Las pruebas iniciales de vuelo del E-4C SAOC, sucesor directo del E-4B Nightwatch vienen de la mano de la Fuerza Aérea estadounidense y Sierra Nevada Corporation.El citado medio indica que “Sierra Nevada ha recibido cuatro de los cinco Boeing 747-8I adquiridos a Korean Air y en ellos se están aplicando profundas modificaciones”. En Dayton, Ohio, y Wichita, Kansas concentran las operaciones de conversión y ensayos, que se extenderán al menos hasta 2026. En torno del ‘salto tecnólogico’ destacan sobre el programa la Fuerza Aérea optó por un modelo de datos abiertos para garantizar que el gobierno sea dueño del diseño y pueda modificarlo en el futuro sin depender exclusivamente del OEM. Xataka señala que el E-4C SAOC resulta, más que una actualización, una apuesta a largo plazo. El contrato firmado con Sierra Nevada termina en once años. Sí, se extiende hasta 2036.En Valdal hablan de un contrato, valorado en más de 13.000 millones de dólares y adjudicado en 2024, que supone un cambio radical en la gestión del Pentágono: por primera vez, Boeing no lidera la integración. La responsabilidad recae en Sierra Nevada, especializada en grandes conversiones, que ha reunido a aliados como Lockheed Martin, Collins Aerospace y Rolls-Royce para crear la plataforma de mando más avanzada de su tiempo.Mejorar la flota de “aviones del juicio final” resulta crucial. La misión del SAOC es puntual: garantizar que, aunque los centros estratégicos en tierra quedasen inutilizados, el liderazgo del país pueda coordinar una respuesta militar y mantener el control de las fuerzas armadas desde el aire. (I)

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