Para quienes tienen y cuidan ganado en Estados Unidos hay una preocupación latente que tiene que ver con la presencia de lobos. Por ello, los ganaderos adoptan estrategias no letales que les permita ahuyentar a estos carnívoros.
El Departamento de Pesca y Vida Silvestre de Washington advierte que “el uso de cualquier dispositivo de ahuyentamiento o fumigación debe coordinarse con el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (WDFW) y las autoridades federales”.
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De igual manera indica que “los dispositivos de ahuyentamiento con luz y ruido pueden utilizarse para ahuyentar a los lobos del ganado confinado y alertar a los pastores de su presencia”.
¿Cómo ahuyentar a los lobos del ganado en Estados Unidos?
Por lo general los ganaderos recurren al uso de armas de fuego, perros y cercas como métodos para cuidar el ganado en Estados Unidos.
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Sin embargo, los biólogos han sumado una nueva herramienta para alejar a los lobos cerca de la frontera entre California y Oregón.
Según datos que proporciona Earth.com, los científicos del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos tuvieron la idea de volar drones para detectar la presencia de los lobos.
Estos dispositivos manejados por pilotos del USDA se utilizan principalmente durante la noche en los pastizales abiertos.
“Cuando una manada se acerca a las vacas, el piloto baja el dron, sube el volumen y vigila si se retiran. Si los lobos se dispersan, la aeronave los sigue hasta que abandonan la zona”, indica Earth.
Los drones usan cámaras termográficas y focos, y emiten ruidos a través de un altavoz que permitan ahuyentar a los lobos, como la música rock de AD/DC, clips de películas y gritos humanos en vivo.
Con este ruido los depredadores retroceden ya que el objetivo es ahuyentar las manadas y que no se acerquen al ganado.
El líder de este proyecto, Dustin Ranglack, afirma que reducir el impacto negativo de los lobos aumenta las probabilidades de “lograr una situación de coexistencia”.
Aunque los lobos grises se habían exterminado en el oeste de Estados Unidos, en la década de 1990 se reintrodujeron en Yellowstone e Idaho lo que ha permitido la recuperación de estos ejemplares por lo que ahora vagan entre Washington y Oregón.
(I)