El monto de la jubilación que reciben los estadounidenses, procura abarcar los gastos esenciales: vivienda, comida, servicios públicos, transporte y seguros. Asimismo, incluye la atención médica, pues las primas y los gastos de bolsillo suelen ser más elevados que los salarios. Esto se debe a que la inflación supera los objetivos a largo plazo.
