A partir de mediados de agosto, millones de beneficiarios del Seguro Social estadounidense no podrán realizar trámites básicos por teléfono como lo han hecho durante décadas.

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La Administración del Seguro Social (SSA) eliminará la posibilidad de cambiar direcciones, consultar el estado de reclamos, solicitar cartas de verificación de beneficios o pedir formularios de impuestos a través de una simple llamada telefónica.

En su lugar, quienes busquen completar estas tareas por teléfono deberán pasar por un proceso de verificación en línea de múltiples pasos para generar un código PIN de un solo uso.

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El Seguro Social de Estados Unidos implementa cambios que afectarán a sus beneficiados. Foto: Freepik

Este cambio forzará a 3.4 millones de personas adicionales a visitar las oficinas locales cada año, según las propias estimaciones de la agencia, recoge el CBPP.

Cambios para los jubilados a partir de agosto

El nuevo sistema de códigos PIN será imposible de completar para muchos beneficiarios, sobre todo aquellos sin acceso confiable a internet o con dificultades tecnológicas.

Los más afectados serán quienes viven en áreas rurales o enfrentan problemas de transporte y movilidad, grupos que ya encuentran desafiante acceder a servicios gubernamentales.

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Algunos beneficiarios recibirán pagos de seguridad social mucho más pequeños a partir de este 1 de julio en Estados Unidos

La medida se suma a restricciones similares implementadas en abril para cambios de información bancaria, que ya generan 1.9 millones de viajes adicionales anuales a las oficinas.

En total, las nuevas políticas obligarán a 5.3 millones de visitas presenciales extra por año, un aumento del 17% respecto al año anterior.

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De forma paradójica, mientras la SSA incrementa la demanda de servicios presenciales, redujo drásticamente el personal que los proporciona.

Este cambio forzará a 3.4 millones de personas adicionales a visitar las oficinas locales. Foto: Freepik

La agencia reasignó aproximadamente mil empleados de oficinas locales para atender la línea telefónica nacional 800, además de los casi dos mil trabajadores que aceptaron paquetes de retiro este año como parte de los mayores recortes de personal en la historia de la SSA.

(I)

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